Feliz Navidad Princesa Leticia.
Carta a los Reyes Magos de kiko exiliado.
Queridos Reyes Magos:
Me llamo kiko exiliado.Luchamos contra una Secta malvada que odia y envidia a la maravillosa Princesa Leticia.Nuestra causa es noble como ustedes saben.No pedimos nada para nosotros porque ya tenemos el mejor regalo posible para nuestro pais:
Su Alteza Real la Princesa Doña Leticia.
Pero si es posible lleven a la casa de las Sectarias un poco de humildad,de razon y jabon.
Atentamente:
Vuestro servidor.
Me llamo kiko exiliado.Luchamos contra una Secta malvada que odia y envidia a la maravillosa Princesa Leticia.Nuestra causa es noble como ustedes saben.No pedimos nada para nosotros porque ya tenemos el mejor regalo posible para nuestro pais:
Su Alteza Real la Princesa Doña Leticia.
Pero si es posible lleven a la casa de las Sectarias un poco de humildad,de razon y jabon.
Atentamente:
Vuestro servidor.
muy felices y comieron perdices
kiko exiliado escribió:Una familia feliz.
si muy felices........sobretodo el principe,se le nota que va muy contento.....
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abc.es
http://www.abc.es/20090110/opinion-cart ... 90110.html
CARTAS AL DIRECTOR Disminuir tamaño del textoAumentar tamaño del texto Sábado, 10-01-09
Gracias, Princesa
Soy padre de una niña que está enferma de cáncer, un cáncer violento y horrible. Llevamos mucho tiempo en el Hospital Niño Jesús de Madrid luchando para que mi hija no se muera. Quien haya pasado por esto, sabe de lo que hablo. Quien no lo sepa, que dé gracias realmente por no conocer el horror. La razón por la que escribo esta carta es la siguiente: por dignidad, porque soy un ciudadano español (perdón si este término suena a derechas o a izquierdas, yo sólo soy una persona) y porque considero que debe conocerse este hecho.
Ocurrió pocos días antes de Nochebuena. Una mañana de tantas en el hospital, una de las supervisoras nos preguntó a varios padres si tendríamos inconveniente en que la Princesa de Asturias nos viniera a saludar. Le dijimos que no. Y así fue, llegó Doña Letizia Ortiz, nos saludo amablemente a todos (casi pidiendo perdón por creer que podría molestar) y se centró en un grupo de niños, entre ellos mi hija. Fue sencillamente maravillosa con todos ellos. Cariñosa y simpática. Y durante toda la mañana saludó a todos y cada uno de los pequeños pacientes de la planta de oncología infantil del hospital. Con la misma sonrisa y con un amor enorme a todos los niños y a unas familias que estamos pasando por un calvario. Y podrán decir ustedes: bueno, y eso para qué sirve. Quien se haga esa pregunta no sabe lo que es tener un hijo enfermo, Sólo les diré una cosa: mi hija fue inmensamente feliz con esa persona llamada Letizia. Y sólo por las lágrimas de emoción de mi hija, por cómo miraba a la Princesa de Asturias mientras ella bromeaba para hacerle sonreír, para disfrutar de esa sonrisa cada vez más apagada, mientras se interesaba por sus dibujos, por la vida, por los sentimientos de mi niña, sólo por eso, yo les digo que el trabajo que hace la Princesa de Asturias merece la pena. Calladamente llegó al hospital y calladamente se fue. Por la puerta principal, sin más historias; sin prensa, sin estridencias. Y he esperado todos estos días para comprobar, una vez más, que lo bueno no se sabe: No sé de monarquías ni de repúblicas, soy un ciudadano de mi tiempo, atento a lo que ocurre en mi país; leo periódicos, veo la tele, escucho la radio. Y sé lo que se dice de ella, pero todo lo que digan da igual. Compartir su tiempo a nuestro lado, el cariño que trasmitía su mirada hacía nuestros hijos, la determinación y el coraje con los que afronta las situaciones que le ha tocado vivir a esta persona, merecen un respeto. Y yo se lo quiero otorgar con estas palabras. Gracias, Princesa.
Carlos Sánchez
(me he emocionado mucho el gesto de la princesa y las palabras de este señor,siento no venir mas por aqui, es que ando muy liada)
Message Thread:
Ls princesa Letizia visita a niños con cáncer en privado - Raquel 6:06 am Today
Gracias Raquel... a
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Gracias, Princesa
Soy padre de una niña que está enferma de cáncer, un cáncer violento y horrible. Llevamos mucho tiempo en el Hospital Niño Jesús de Madrid luchando para que mi hija no se muera. Quien haya pasado por esto, sabe de lo que hablo. Quien no lo sepa, que dé gracias realmente por no conocer el horror. La razón por la que escribo esta carta es la siguiente: por dignidad, porque soy un ciudadano español (perdón si este término suena a derechas o a izquierdas, yo sólo soy una persona) y porque considero que debe conocerse este hecho.
Ocurrió pocos días antes de Nochebuena. Una mañana de tantas en el hospital, una de las supervisoras nos preguntó a varios padres si tendríamos inconveniente en que la Princesa de Asturias nos viniera a saludar. Le dijimos que no. Y así fue, llegó Doña Letizia Ortiz, nos saludo amablemente a todos (casi pidiendo perdón por creer que podría molestar) y se centró en un grupo de niños, entre ellos mi hija. Fue sencillamente maravillosa con todos ellos. Cariñosa y simpática. Y durante toda la mañana saludó a todos y cada uno de los pequeños pacientes de la planta de oncología infantil del hospital. Con la misma sonrisa y con un amor enorme a todos los niños y a unas familias que estamos pasando por un calvario. Y podrán decir ustedes: bueno, y eso para qué sirve. Quien se haga esa pregunta no sabe lo que es tener un hijo enfermo, Sólo les diré una cosa: mi hija fue inmensamente feliz con esa persona llamada Letizia. Y sólo por las lágrimas de emoción de mi hija, por cómo miraba a la Princesa de Asturias mientras ella bromeaba para hacerle sonreír, para disfrutar de esa sonrisa cada vez más apagada, mientras se interesaba por sus dibujos, por la vida, por los sentimientos de mi niña, sólo por eso, yo les digo que el trabajo que hace la Princesa de Asturias merece la pena. Calladamente llegó al hospital y calladamente se fue. Por la puerta principal, sin más historias; sin prensa, sin estridencias. Y he esperado todos estos días para comprobar, una vez más, que lo bueno no se sabe: No sé de monarquías ni de repúblicas, soy un ciudadano de mi tiempo, atento a lo que ocurre en mi país; leo periódicos, veo la tele, escucho la radio. Y sé lo que se dice de ella, pero todo lo que digan da igual. Compartir su tiempo a nuestro lado, el cariño que trasmitía su mirada hacía nuestros hijos, la determinación y el coraje con los que afronta las situaciones que le ha tocado vivir a esta persona, merecen un respeto. Y yo se lo quiero otorgar con estas palabras. Gracias, Princesa.
Carlos Sánchez
(me he emocionado mucho el gesto de la princesa y las palabras de este señor,siento no venir mas por aqui, es que ando muy liada)
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Ls princesa Letizia visita a niños con cáncer en privado - Raquel 6:06 am Today
Gracias Raquel... a
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justiciero escribió:abc.es
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Gracias, Princesa
Soy padre de una niña que está enferma de cáncer, un cáncer violento y horrible. Llevamos mucho tiempo en el Hospital Niño Jesús de Madrid luchando para que mi hija no se muera. Quien haya pasado por esto, sabe de lo que hablo. Quien no lo sepa, que dé gracias realmente por no conocer el horror. La razón por la que escribo esta carta es la siguiente: por dignidad, porque soy un ciudadano español (perdón si este término suena a derechas o a izquierdas, yo sólo soy una persona) y porque considero que debe conocerse este hecho.
Ocurrió pocos días antes de Nochebuena. Una mañana de tantas en el hospital, una de las supervisoras nos preguntó a varios padres si tendríamos inconveniente en que la Princesa de Asturias nos viniera a saludar. Le dijimos que no. Y así fue, llegó Doña Letizia Ortiz, nos saludo amablemente a todos (casi pidiendo perdón por creer que podría molestar) y se centró en un grupo de niños, entre ellos mi hija. Fue sencillamente maravillosa con todos ellos. Cariñosa y simpática. Y durante toda la mañana saludó a todos y cada uno de los pequeños pacientes de la planta de oncología infantil del hospital. Con la misma sonrisa y con un amor enorme a todos los niños y a unas familias que estamos pasando por un calvario. Y podrán decir ustedes: bueno, y eso para qué sirve. Quien se haga esa pregunta no sabe lo que es tener un hijo enfermo, Sólo les diré una cosa: mi hija fue inmensamente feliz con esa persona llamada Letizia. Y sólo por las lágrimas de emoción de mi hija, por cómo miraba a la Princesa de Asturias mientras ella bromeaba para hacerle sonreír, para disfrutar de esa sonrisa cada vez más apagada, mientras se interesaba por sus dibujos, por la vida, por los sentimientos de mi niña, sólo por eso, yo les digo que el trabajo que hace la Princesa de Asturias merece la pena. Calladamente llegó al hospital y calladamente se fue. Por la puerta principal, sin más historias; sin prensa, sin estridencias. Y he esperado todos estos días para comprobar, una vez más, que lo bueno no se sabe: No sé de monarquías ni de repúblicas, soy un ciudadano de mi tiempo, atento a lo que ocurre en mi país; leo periódicos, veo la tele, escucho la radio. Y sé lo que se dice de ella, pero todo lo que digan da igual. Compartir su tiempo a nuestro lado, el cariño que trasmitía su mirada hacía nuestros hijos, la determinación y el coraje con los que afronta las situaciones que le ha tocado vivir a esta persona, merecen un respeto. Y yo se lo quiero otorgar con estas palabras. Gracias, Princesa.
Carlos Sánchez
(me he emocionado mucho el gesto de la princesa y las palabras de este señor,siento no venir mas por aqui, es que ando muy liada)
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Ls princesa Letizia visita a niños con cáncer en privado - Raquel 6:06 am Today
Gracias Raquel... a
Despues las de la Secta se atreven a insultarla.Que asco me dan.
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justiciero escribió:abc.es
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Gracias, Princesa
Soy padre de una niña que está enferma de cáncer, un cáncer violento y horrible. Llevamos mucho tiempo en el Hospital Niño Jesús de Madrid luchando para que mi hija no se muera. Quien haya pasado por esto, sabe de lo que hablo. Quien no lo sepa, que dé gracias realmente por no conocer el horror. La razón por la que escribo esta carta es la siguiente: por dignidad, porque soy un ciudadano español (perdón si este término suena a derechas o a izquierdas, yo sólo soy una persona) y porque considero que debe conocerse este hecho.
Ocurrió pocos días antes de Nochebuena. Una mañana de tantas en el hospital, una de las supervisoras nos preguntó a varios padres si tendríamos inconveniente en que la Princesa de Asturias nos viniera a saludar. Le dijimos que no. Y así fue, llegó Doña Letizia Ortiz, nos saludo amablemente a todos (casi pidiendo perdón por creer que podría molestar) y se centró en un grupo de niños, entre ellos mi hija. Fue sencillamente maravillosa con todos ellos. Cariñosa y simpática. Y durante toda la mañana saludó a todos y cada uno de los pequeños pacientes de la planta de oncología infantil del hospital. Con la misma sonrisa y con un amor enorme a todos los niños y a unas familias que estamos pasando por un calvario. Y podrán decir ustedes: bueno, y eso para qué sirve. Quien se haga esa pregunta no sabe lo que es tener un hijo enfermo, Sólo les diré una cosa: mi hija fue inmensamente feliz con esa persona llamada Letizia. Y sólo por las lágrimas de emoción de mi hija, por cómo miraba a la Princesa de Asturias mientras ella bromeaba para hacerle sonreír, para disfrutar de esa sonrisa cada vez más apagada, mientras se interesaba por sus dibujos, por la vida, por los sentimientos de mi niña, sólo por eso, yo les digo que el trabajo que hace la Princesa de Asturias merece la pena. Calladamente llegó al hospital y calladamente se fue. Por la puerta principal, sin más historias; sin prensa, sin estridencias. Y he esperado todos estos días para comprobar, una vez más, que lo bueno no se sabe: No sé de monarquías ni de repúblicas, soy un ciudadano de mi tiempo, atento a lo que ocurre en mi país; leo periódicos, veo la tele, escucho la radio. Y sé lo que se dice de ella, pero todo lo que digan da igual. Compartir su tiempo a nuestro lado, el cariño que trasmitía su mirada hacía nuestros hijos, la determinación y el coraje con los que afronta las situaciones que le ha tocado vivir a esta persona, merecen un respeto. Y yo se lo quiero otorgar con estas palabras. Gracias, Princesa.
Carlos Sánchez
(me he emocionado mucho el gesto de la princesa y las palabras de este señor,siento no venir mas por aqui, es que ando muy liada)
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Ls princesa Letizia visita a niños con cáncer en privado - Raquel 6:06 am Today
Gracias Raquel... a
Es maravilloso leer cosas de este estilo
Navidades reales
Navidades reales
Es tiempo de conciertos, de regalos solidarios, de funciones para niños..., y también de trabajo o de viajes. Así pasan estas fechas los miembros de las familias reales europeas.
Sin duda, forman la pareja del momento. Mientras sus ayudantes preparan la que sin duda será 'boda del año' -se casan el 29 de abril de 2011-, ellos viven la Navidad realzando con su presencia una gala benéfica.
En Navidad vuelven a casa los hijos que viven en el extranjero. Igual que la Infanta Cristina, residente en Washington, que ya está en España y asistió con su padre, el Rey, a un concierto del Orfeón Donostiarra en el Palacio Real.
Otro que ha vuelto a casa por Navidad: Felipe Juan Froilán, que está estudiando en Inglaterra. En la imagen, con su madre, la Infanta Elena, paseando por las calles de Madrid.
Carolina, con chaqueta de Chanel, también acompañó a su hermano en el reparto de regalos.
En Dinamarca, la princesa Mary, con el embarazo ya muy avanzado, asistió a una representación de ballet acompañada de su hijo Christian.
Es tiempo de conciertos, de regalos solidarios, de funciones para niños..., y también de trabajo o de viajes. Así pasan estas fechas los miembros de las familias reales europeas.
Sin duda, forman la pareja del momento. Mientras sus ayudantes preparan la que sin duda será 'boda del año' -se casan el 29 de abril de 2011-, ellos viven la Navidad realzando con su presencia una gala benéfica.
La Princesa Letizia, además de asistir a la función de Navidad del colegio de sus hijas, las infantas Leonor y Sofía, continúa trabajando. En la imagen, en una reunión en la RAE.
En Navidad vuelven a casa los hijos que viven en el extranjero. Igual que la Infanta Cristina, residente en Washington, que ya está en España y asistió con su padre, el Rey, a un concierto del Orfeón Donostiarra en el Palacio Real.
Los príncipes herederos de Holanda, Guillermo y Máxima, han huido del frío de Europa y han viajado a Argentina, país de nacimiento de ella, para pasar estos días con sus tres hijas, Alexia, Amalia y Ariana.
Otro que ha vuelto a casa por Navidad: Felipe Juan Froilán, que está estudiando en Inglaterra. En la imagen, con su madre, la Infanta Elena, paseando por las calles de Madrid.
En Mónaco los Grimaldi se ocupan todos los años de repartir juguetes entre los niños del Principado. La princesa Estefanía nunca falta a la cita.
Carolina, con chaqueta de Chanel, también acompañó a su hermano en el reparto de regalos.
Pero si en Mónaco hay una primera dama en este momento, esa es Charlene Wittstock, la prometida del príncipe Alberto, que últimamente desluce a sus futuras cuñadas.
En Dinamarca, la princesa Mary, con el embarazo ya muy avanzado, asistió a una representación de ballet acompañada de su hijo Christian.
La princesa Matilde de Bélgica, en la cóctel posterior al concierto de Navidad al que asistió la familia real belga.