Triana amenazó al ‘número 2’ de Carrasco: «Esto no va a quedar así»FELIPE RAMOS
Pidió que le filtraran las preguntas del examen
La ingeniera suspendió el primer ejercicio de la oposición con una nota de 2,275
Triana Martínez exigió que le pasaran las preguntas de la oposición. La hija de la asesina confesa de Isabel Carrasco adujo, tres días antes del examen, que de lo contrario no aprobaría, porque no lo había preparado. Su nota fue de un 2,275 en el primer ejercicio.
La joven de 35 años y su madre, Montserrat González, vivían obsesionadas desde que la Diputación de León decidió sacar a oposición el 27 de enero de 2010 la plaza de ingeniero en Telecomunicaciones que ella ocupaba como interina desde el 14 de mayo de 2007. Desde esa fecha y hasta que se produce su salida –por no haber superado el examen– el 5 de mayo de 2011, e incluso, como se ha demostrado durante la investigación, mucho después, madre e hija venían pidiendo esa plaza en propiedad.
Para conseguirla estaban dispuestas a todo y exigían a los políticos y cargos del PP que les ayudaran a que ella siguiera siendo la ingeniera en Telecomunicaciones de la Diputación de León. A uno de los que también presionaron fue al vicepresidente de la Diputación y alcalde de Cuadros, Marcos Martínez Barazón.
Sus presiones llegaron hasta tal punto que, tres días antes del examen, que tuvo lugar en marzo de 2011, la hija de la asesina confesa de Carrasco se plantó en el despacho de Alcaldía de Martínez Barazón –después de intentar sin éxito que la recibiera en la Diputación sin conseguirlo– para exigirle que le pasara las preguntas del examen. Su desfachatez fue tal que no dudó en decir que lo tenía que hacer, porque de lo contrario no aprobaría.
La negativa de Marcos Martínez fue rotunda, invitándola a abandonar de inmediato su despacho. Finalmente, y según consta en la información facilitada ayer por la jefa de servicio de Recursos Humanos de la institución provincial, Ángel Lescún, Montserrat Triana Martínez se presentó al examen de la oposición y no superó ni siquiera el primero de los tres ejercicios de que constaba, en el que apenas sacó un 2,275 puntos, frente a los 5,905 del opositor que finalmente obtuvo la plaza.
«Esto no va a quedar así», llegó a decirle en un tono amenazante Montserrat Triana Martínez al entonces vicepresidente y ahora presidente en funciones de la Diputación de León, Marcos Martínez Barazón, durante un encuentro que forzó junto a su madre a las puertas de su despacho en la institución hace ahora un año.
El odio y la «inquina» –tal y como la propia asesina confesa, Montserrat González, reconoció en su declaración– que madre e hija sentían hacia la presidenta de la Diputación, Isabel Carrasco, ha concluido con ambas en la cárcel de Mansilla de las Mulas, acusadas de homicidio.
Madre e hija se plantaron en la institución provincial, como ya habían hecho en otras muchas ocasiones, para exigir ver a Martínez Barazón. Ante la negativa a ser recibidas, dejaron claro a la ordenanza que las atendió que no se moverían de allí hasta que las viera. Finalmente, fueron recibidas en el pasillo, a la puerta del despacho, y allí volvieron a reclamar, además de que le devolvieran su trabajo, que le retiraran la demanda por la que la Diputación pide a Triana 6.583,80 euros, correspondientes a un complemento específico que había cobrado de forma indebida.
«No me podéis hacer esto a mí», afirmó la hija de la asesina confesa de Carrasco, en un tono claramente amenazante, según detallan fuentes próximas a la investigación a las que ha tenido acceso EL MUNDO. «Con lo que yo hecho por vosotros, por el partido y por esta casa...», continuó Triana. Advertencias que no recibieron otra respuesta por parte del hoy presidente en funciones que la de que ella no había conseguido la plaza porque no aprobó el examen y que ese dinero debía ser reembolsado, porque lo había percibido de forma indebida.
Argumentos que, según las mismas fuentes, hicieron que el tono amenazante de ambas subiera aún más, para terminar con un «no me podéis tratar así». Afirmaciones todas que, según la investigación, corroboran la venganza como el único móvil del brutal asesinato de Isabel Carrasco de un tiro en la nuca, rematándola con otros dos en la espalda, cuando la presidenta del PP de León y de la Diputación yacía ya muerta en el suelo.
Asimismo, ayer, el Ayuntamiento de León decidió apartar a la policía local Raquel Gago, abrirle un expediente disciplinario por una falta muy grave y suspenderla de empleo y sueldo, por no poner en conocimiento de sus superiores que había entrado en contacto con su amiga íntima Triana inmediatamente después del crimen.
La agente, a la que Triana dejó el bolso-bandolera con la pistola para que lo ocultase en el maletero de su coche, sigue sin explicar por qué no informó a sus mandos de esa circunstancia.
De hecho, Raquel sólo habló con una persona, el novio de su hermana, que es policía nacional, a quien pidió consejo sobre qué debía hacer. Él fue quien la acompañó a la comisaría en la noche del martes, en torno a las 22.20 horas, para que hiciera entrega del bolso y del revólver.
En su declaración, la agente relató que se encontró con su amiga y que ésta le dijo que si podía guardar «una cosa» en su coche, lo que hizo, para después despedirse diciendo que se iba a la frutería. La Policía asegura que se percató de la existencia del bolso en el maletero de su coche cuando fue a meter la bicicleta, en la tarde del martes. Es en ese momento cuando decidió hablar con el novio de su hermana y llevar el bolso y el arma a la comisaría de Villabenavente. La investigación no cree su versión y ha abierto una nueva línea de trabajo, que pasa por que Raquel hubiera prestado su vehículo a su amiga.
EL MUNDO. VIERNES 16 DE MAYO DE 2014