ARGENTINA NO CONFIABLE...

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Mensajepor Invitado » Lun 02 Nov, 2015 2:50 am

Nada es lo que parece en la Argentina

Los que perdieron el 25 de octubre festejaron como si hubieran ganado y los que ganaron sufrieron como si hubieran perdido, en espera de la segunda vuelta de noviembre

Fernando Krakowiak


El domingo 25 de octubre, el candidato oficialista Daniel Scioli derrotó al líder opositor Mauricio Macri con el 36,8% frente al 34,3% y ambos definirán la elección presidencial en un ballottage (segunda vuelta) el próximo 22 de noviembre. Ese es el dato duro que arrojó la elección. Sin embargo, en Argentina nada es lo que parece. La ventaja del oficialismo fue mucho más acotada con respecto a los casi diez puntos de diferencia que preveían las encuestas. Por lo tanto, los que perdieron festejaron como si hubieran ganado y los que ganaron sufrieron como si hubieran perdido, pues ven que su triunfo peligra de cara a la segunda vuelta. El motivo es simple: los votos de la tercera fuerza en discordia, que obtuvo el 21,3%, parecen estar más cerca de la oposición que del oficialismo, mientras que los candidatos que quedaron detrás están llamando a votar en blanco.

A este escenario, ya de por sí complejo, hay que agregarle que Scioli provoca desconfianza en muchos kirchneristas, quienes no terminan de verlo como un garante de la continuidad del proyecto que Néstor y Cristina Kirchner llevaron adelante durante los últimos doce años. En la vereda de enfrente, el empresario Mauricio Macri, alcalde de la Ciudad de Buenos Aires y candidato liberal de la derecha, gana terreno con una estrategia propia del marketing donde las propuestas concretas pierden terreno frente a la reivindicación de lugares comunes como la necesidad de privilegiar el diálogo, trabajar en equipo, recuperar la confianza y gobernar con humildad.


“Fe, esperanza y optimismo”

“Argentina necesita construir a partir de lo construido”. Ese fue el eslogan que eligió Daniel Scioli, de 58 años, durante la campaña para intentar mostrarse como la continuidad del kirchnerismo, algo que no resulta para nada obvio, pese a que fue vicepresidente de Néstor Kirchner entre 2003 y 2007, donde llegó como parte de un acuerdo político con el entonces presidente peronista Eduardo Duhalde. También ha sido gobernador de Buenos Aires, la principal provincia argentina, desde 2007 hasta la actualidad en representación del Frente para la Victoria, la vertiente peronista de izquierda que encabeza Cristina Fernández de Kirchner. El problema es que, más allá de los lugares que ocupó, nunca se le han podido sacar definiciones políticas demasiado precisas. Su frase de cabecera es que hay que “trabajar con fe, esperanza y optimismo”, una expresión más propia de un libro de autoayuda que de un manual de conducción política.

Sus antecedentes previos al kirchnerismo tampoco entusiasman a la militancia de ese frente. Scioli se hizo conocido como corredor de motonáutica, deporte en el que perdió un brazo el 4 de diciembre de 1989, mientras disputaba una regata en el Delta de Paraná. Ingresó en la política recién cumplidos los 40 años cuando en 1997 el entonces presidente Carlos Menem sorprendió al elegirlo para encabezar la lista de diputados nacionales de la Ciudad de Buenos Aires. Desde ese momento, no ha mostrado más que gratitud hacia Menem, un hombre muy cuestionado por el kirchnerismo, espacio que construyó su identidad en oposición al liberalismo privatizador de la década del 90.

Pese a ello, el pasado 16 de junio Cristina Fernández de Kirchner lo eligió como su sucesor y le puso a Carlos Zannini, uno de sus hombres de mayor confianza, como candidato a vicepresidente. El motivo principal fue que Scioli era el precandidato oficialista mejor posicionado en las encuestas. Por lo tanto, la presidenta apostó por llenar las listas con kirchneristas de su confianza para que Scioli los llevara a la victoria. “El candidato es el proyecto”, comenzaron a repetir funcionarios y militantes, pero lo que en realidad mostró la designación de Scioli fue la debilidad de ese proyecto, que se recostó casi exclusivamente sobre la figura de Cristina Fernández de Kirchner y luego de doce años en el poder no fue capaz de ofrecer un candidato alternativo capaz de conformar a su militancia, sabiendo que la presidenta no podría presentarse nuevamente a la reelección por una prohibición constitucional.

A partir de entonces, todos se encolumnaron detrás del exmotonauta, pero la desconfianza permanece. De hecho, Horacio González, uno de los mayores referentes del grupo de intelectuales kirchneristas llamado Carta Abierta, declaró la semana pasada: “Vamos a votar a Scioli, pero desgarrados”. El candidato oficialista ayudó a acrecentar esa desconfianza al anunciar una serie de medidas tendientes a ampliar su caudal de votos. Los días previos a la elección, sus asesores dejaron trascender que si gana va a reducir los derechos de exportación a la soja y directamente eliminar los que pagan otros cultivos como el maíz y el trigo. Además, el propio Scioli prometió en su cierre de campaña que va a reducir el impuesto a los ingresos que abona la clase media alta. Tanto los derechos de exportación como el impuesto a los ingresos fueron siempre defendidos por el kirchnerismo como parte de su plan de redistribución de la renta. Por lo tanto, la medida no hizo más que acrecentar los temores sobre lo que podría venir. Desde el sciolismo responden que no hay nada de qué preocuparse porque, al margen de algunas decisiones puntuales, lo importante es el plan de desarrollo productivo que impulsara el candidato, algo imposible de corroborar más allá de lo que dicen algunos documentos redactados para la campaña. En última instancia, lo que ahora reclama Scioli a los kirchneristas no es muy diferente a lo que siempre dijo: “Fe, esperanza y optimismo”.


“No expliques nada”

Un empresario millonario que comenzó a militar en política hace poco más de una década quedó el domingo 25 de octubre a las puertas de la presidencia. Hijo de un inmigrante italiano dueño de una fortuna y nieto del fundador del Frente del Uomo Qualunque, Mauricio Macri, de 56 años, era el heredero natural del Grupo Macri hasta que decidió tomar distancia del camino que le había trazado su padre y probó suerte como candidato a la presidencia del club Boca Juniors en diciembre de 1995, en una elección que ganó con comodidad. Al frente de Boca, se hizo popular, sobre todo gracias a los logros deportivos que obtuvo el club, en el que permaneció hasta 2007.

En 2003 coqueteó por primera vez con la posibilidad de ser candidato a presidente de la Nación, pero finalmente se inclinó por competir por la jefatura de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires el 24 de agosto de ese año, encabezando la lista de Compromiso para el Cambio, partido fundado apenas cinco meses antes. Logró llegar a segunda vuelta, pero perdió por siete puntos. En 2005, Compromiso para el Cambio se unió con el partido de derecha Recrear y surgió Propuesta Republicana, alianza conocida como el PRO, que lo llevaría a la Jefatura de Gobierno a partir del 10 de diciembre de 2007.

En 2011, Macri volvió a evaluar la posibilidad de presentarse como candidato a presidente, pero en el último momento decidió ir por la reelección en la Ciudad, desde donde siguió trabajando para consolidar su proyecto presidencial. Uno de los principales inconvenientes del PRO para llegar a la presidencia de la Nación era la falta de representación territorial en el conjunto del país, ya que era fundamentalmente un partido local. Sin embargo, a comienzos de este año selló una alianza con sectores de la Unión Cívica Radical, un centenario partido con representación en todas las provincias. Así nació el frente Cambiemos que llevó a Macri como candidato.

Al igual que el kirchnerismo, el macrismo es un producto de la crisis económica y social que vivió la Argentina en 2001, pero con una propuesta diferente. Lo que hicieron fue interpelar a organizaciones del sector privado como ONGs, think tanks, fundaciones e incluso gerentes de empresas, bajo la consigna de que sólo participando en política se puede cambiar la realidad. Fue así como lograron reclutar a muchas personas de sectores sociales acomodados que nunca habían formado parte de ningún partido, aunque también llegó gente del peronismo y el radicalismo.

El PRO, o ahora Cambiemos, es un espacio de derecha que identifica al mercado como el mejor asignador de los recursos, pero sus dirigentes aseguran que el Estado tiene un papel que cumplir, ya sea generando oportunidades de negocios o a través de la asistencia social. Esto último, tal vez, para no espantar a todos aquellos sectores de clase baja que hoy dependen del Estado para subsistir y temen quedar desamparados. Lo que está claro es que no creen en un Estado encargado de gestionar empresas. Por eso se opusieron a la estatización de YPF y de Aerolíneas Argentinas, entre otras firmas. Ese es un mundo que reservan para las compañías privadas, aunque muchas veces esas empresas, como las del propio Grupo Macri, hayan prosperado gracias a jugosos contratos de obra pública que les garantizó el Estado.

En el PRO tienen claro lo que buscan, pero no profundizan demasiado en las propuestas. El diputado Federico Sturzenegger contó en una conferencia celebrada en abril del año pasado, que luego se filtró a la prensa, los consejos que le dio el asesor ecuatoriano en comunicación Jaime Durán Barba antes de presentarse en un debate televisivo durante la campaña electoral previa a las elecciones legislativas de 2013. “Te voy a pedir que hagas cuatro cosas y todo va a estar bien”, recordó Sturzenegger. “La primera es que no propongas nada”, le dijo Durán Barba. “¿Que no proponga nada? ¿Qué estás diciendo? Me preparé 35 años para ir al Congreso a proponer cosas”, recordó haberle contestado. “No, la gente no está particularmente preocupada por esas cosas. Así que no pierdas tu tiempo, eso no es relevante para la gente”, fue lo que le retrucó el consultor político del PRO. Lo segundo que le dijo Durán Barba fue: “No expliques nada”. “¿De qué voy a hablar si no puedo explicar nada?”, recordó haberle respondido Sturzenegger y agregó que eso le molestaba porque uno de los temas era la inflación. “Si vos explicás qué es la inflación, vas a tener que explicar que la emisión monetaria genera inflación, que entonces debería reducirse la emisión, y que si entonces hacés eso tendrías que hacer un ajuste fiscal, y que si hacés un ajuste fiscal entonces la gente va a perder su trabajo y eso es lo que no queremos que digas”, remarcó Durán Barba y agregó: “Cuando seas gobierno hacé lo que vos creas, pero no lo digas ahora en medio del debate.” “¿Qué digo entonces?”, le preguntó Sturzenegger. “Sólo decí que están mintiendo con la inflación. O decí cualquier cosa, hablá de tus hijos. No importa”, concluyó Durán Barba. Es por ese motivo que desde el PRO prefieren hablar de la importancia del “diálogo”, el “consenso”, el “trabajo en equipo” y la “gestión eficiente” sin profundizar mucho más.

La estética también es central para estos dirigentes. En todos los festejos de los triunfos que lograron desde 2007, siempre hubo globos de colores, música y baile, como si fuera una fiesta de casamiento cuidadosamente organizada. Otra particularidad distintiva es que sus candidatos son Mauricio, Gabriela, María Eugenia y Horacio. El apellido desaparece para generar mayor cercanía y complicidad con el votante. En la campaña de 2007, el entonces presidente Néstor Kirchner buscó dejar en evidencia esa estrategia. "Los que representan el modelo neoliberal hoy pueden llamarse Mauricio, pero siempre serán Macri. Mauricio es Macri”, aseguró.

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Mensajepor Invitado » Lun 02 Nov, 2015 2:59 am

Una esperanza argentina

Los ciudadanos tienen la oportunidad de votar por una alternativa al peronismo. Pero el 22 de noviembre, el poder kirchnerista moverá todos los resortes a su alcance, como la intimidación, el soborno y el fraude, para evitar una derrota

MARIO VARGAS LLOSA


LOS RESULTADOS de las elecciones del domingo pasado en Argentina desmintieron todos los sondeos de opinión según los cuales el candidato Daniel Scioli, apoyado por la jefe de Estado, Cristina Fernández de Kirchner, ganaría en primera vuelta. Y han abierto la posibilidad de que el país que fue algo así como el faro de América Latina salga de la decadencia económica y política en que está hundido desde hace más de medio siglo, y recupere el dinamismo y la creatividad que hicieron de él, en el pasado, un país del primer mundo.

La condición es que en la segunda vuelta electoral, el 22 de noviembre, gane Mauricio Macri y el electorado confirme el rechazo frontal que ha recibido en la primera el kirchnerismo, una de las más demagógicas y corruptas ramas de esa entelequia indescifrable llamada peronismo, un sistema de poder parecido al antiguo PRI mexicano, en el que caben todas las variantes del espectro ideológico, de la extrema derecha a la extrema izquierda, pasando por todos los matices intermedios.

La novedad que encarna Macri no son tanto las ideas modernas y realistas de su programa, su clara vocación democrática, ni el sólido equipo de plan de gobierno que ha reunido, sino que por primera vez el electorado argentino tiene ahora la oportunidad de votar por una efectiva alternativa al peronismo, el sistema que ha conducido al empobrecimiento y al populismo más caótico y retardatario al país más culto y con mayores recursos de América Latina.

No será fácil, desde luego, pero (por primera vez en muchas décadas) sí es posible. La victoria, en las elecciones para la gobernación provincial de Buenos Aires, tradicional ciudadela peronista, de María Eugenia Vidal, de inequívocas credenciales liberales, es un indicio claro del desencanto de un vasto sector popular con una política que, detrás de la apariencia de medidas de “justicia social”, antiamericanismo y prochavismo, ha disparado la inflación, reducido drásticamente las inversiones extranjeras, lastimado la credibilidad financiera del país en todos los mercados mundiales y puesto a Argentina a orillas de la recesión.

El sistema que encarna la señora Kirchner se va a defender con uñas y dientes, como es natural, y ya es un indicio de lo que podría suceder el que, el domingo pasado, el Gobierno permaneciera mudo, sin dar los resultados, más de seis horas después de conocer el escrutinio, luego de haber prometido que lo haría público de inmediato. La posibilidad del fraude está siempre allí y la única manera de conjurarlo es, para la alianza de partidos que apoya a Macri, garantizar la presencia de interventores en todas las mesas electorales que defiendan el voto genuino y —si la hubiera— denuncien su manipulación.

Dos hechos notables de las elecciones del 25 de octubre son los siguientes: Macri aumentó su caudal electoral en cerca de un millón setecientos mil votos y el número de electores se incrementó de manera espectacular, del 72% de los inscritos en la pasada elección, a algo más del 80% en esta. La conclusión es evidente: un sector importante del electorado, hasta ahora indiferente o resignado ante el statu quo, esta vez, renunciando al conformismo, se movilizó y fue a votar, convencido de que su voto podía cambiar las cosas. Y, en efecto, así ha sido. Y lo ha hecho discretamente, sin publicitarlo de antemano, por prudencia o temor ante las posibles represalias del régimen. De ahí la pavorosa metida de pata de las encuestas que anunciaban un triunfo categórico de Scioli, el candidato oficialista, en la primera vuelta. Pero el 22 de noviembre no ocurrirá lo mismo: el poder kirchnerista sabe los riesgos que corre con un triunfo de la oposición y moverá todos los resortes a su alcance, que son muchos —la intimidación, el soborno, las falsas promesas, el fraude—, para evitar una derrota. Hay que esperar que el sector más sano y democrático de los peronistas disidentes, que han contribuido de manera decisiva a castigar al kirchnerismo, no se deje encandilar con los llamados a la unidad partidista (que no existe hace mucho tiempo) y no desperdicie esta oportunidad de enmendar un rumbo político que ha regresado a la Argentina a un subdesarrollo tercermundista que no se merece.

No se lo merece por la variedad y cantidad de recursos de su suelo, uno de los más privilegiados del mundo, y por el alto nivel de integración de su sociedad y lo elevado de su cultura. Cuando yo era niño, mis amigos del barrio de Miraflores, en Lima, soñaban con ir a formarse como profesionales no en Estados Unidos ni en Europa, sino en Argentina. Esta tenía entonces todavía un sistema de educación ejemplar, que había erradicado el analfabetismo —uno de los primeros países en lograrlo— y que el mundo entero tenía como modelo. La buena literatura y las películas más populares en mi infancia boliviana y adolescencia peruana venían de editoriales y productores argentinos, y las compañías de teatro porteñas recorrían todo el continente poniéndonos al día con las obras de Camus, Sartre, Tennessee Williams, Arthur Miller, Valle Inclán, etcétera.

Es verdad que ni siquiera los países más cultos están inmunizados contra las ideologías populistas y totalitarias, como demuestran los casos de Alemania e Italia. Pero el fenómeno del peronismo es, al menos para mí, más misterioso todavía que el del pueblo alemán abrazando el nazismo y el italiano el fascismo. No hay duda alguna de que la antigua democracia argentina —la de la república oligárquica— era defectuosa, elitista, y que se precisaban reformas que extendieran las oportunidades y el acceso a la riqueza a los sectores obreros y campesinos. Pero el peronismo no llevó a cabo esas reformas, porque su política estatista e intervencionista paralizó el dinamismo de su vida económica e introdujo los privilegios y sinecuras partidistas a la vez que el gigantismo estatal. El empobrecimiento sistemático del país multiplicó la desigualdad y las fracturas sociales. Lo sorprendente es la fidelidad de una enorme masa de argentinos con un sistema que, a todas luces, sólo favorecía a una nomenclatura política y a sus aliados del sector económico, una pequeña oligarquía rentista y privilegiada. Los golpes y las dictaduras militares contribuyeron, sin duda, a mantener viva la ilusión peronista.

Recuerdo mi sorpresa la primera vez que fui a la Argentina, a mediados de los años sesenta, y descubrí que en Buenos Aires había más teatros que en París, donde vivía. Desde entonces he seguido siempre, con tanta fascinación como pasmo, los avatares de un país que parecía empeñado en desoír todas las voces sensatas que querían reformarlo y que, en su vida política, no cesaba de perseverar en el error. Tal vez por eso he celebrado el domingo 25 los resultados de esa primera vuelta con entusiasmo juvenil. Y, cruzando los dedos, hago votos por que el 22 de noviembre una mayoría inequívoca de electores argentinos muestre la misma lucidez y valentía llevando al poder a quien representa el verdadero cambio en libertad.

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marcelo de bolos

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Mensajepor marcelo de bolos » Lun 14 Dic, 2015 6:33 pm



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Nisman

Mensajepor Invitado » Vie 08 Ene, 2016 1:07 am



En Portada - Nisman
En Portada investiga la muerte del fiscal argentino que quiso imputar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. El reportaje muestra desde la diputada que acusa al Ejército, al ex director de Inteligencia que señala a un asesino extranjero o al magistrado que asegura que fue un suicidio.

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Mensajepor Invitado » Vie 29 Ene, 2016 2:47 am

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El Gobierno de Macri aumenta el precio de la luz en un 350%

El tarifazo acaba con 12 años de subsidios kirchneristas e irá seguido de nuevas subidas. El anuncio se suma a una devaluación del 40% de la moneda nacional y a una ola de despidos


En medio de flamígeras olas de calor y los efectos de la devaluación del 40% de la moneda, los argentinos saben que, desde ahora, el uso del aire acondicionado será para muchos otro de los lujos imperdonables. El Gobierno del presidente Mauricio Macri ha decidido terminar con los subsidios a las tarifas del servicio eléctrico y ha dipuesto un aumento de hasta el 350% del precio del consumo.

Dado el impacto de la medida, el ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren se reserva para los próximos días el anuncio de la inminente suba de las tarifas del servicio del gas y la telefonía celular. El tarifazo, como lo han llamado los medios de prensa, fue explicado por las autoridades como una consecuencia del "desfase existente entre los costos reales y los precios vigentes”. A partir de febrero, el precio de la luz que pagan los argentinos será estacional. Eso, señaló el diario La Nación, “abre la puerta a nuevos aumentos en el futuro”.

Durante la era kirchnerista (2003-2015) los precios se mantuvieron prácticamente sin variaciones. Una familia que vive en un apartamento de dos ambientes suele gastar unos 15 euros bimestrales antes del verano, cuando el consumo explota. Al justificar los cambios, el Gobierno de Macri tiene en cuenta otro elemento distorsivo en un país donde los sectores de mayor poder adquisitivo pagaban casi lo mismo que los que menos ganan. En adelante, se tendrán en cuenta “las posibilidades de pago de los usuarios” y habrá una "tarifa social" para los hogares más necesitados. Con estas medidas se busca “prevenir un impacto negativo en la economía” y afianza las condiciones propicias para la incorporación de inversiones privadas".

El ingeniero Aranguren, que hasta el años pasado se desempeñaba como CEO de Shell Argentina, explicó días atrás que el tarifazo era inevitable. “Fue una década de desinversión y tenemos una generación de energía que está al límite”. Los argentinos deben entender las nuevas reglas de juego y modificar sus hábitos de consumo. “Debe haber cambios de conducta”.

Para enfrentar el calor estival, con temperaturas de 40 grados, “tenemos que mantener los aires acondicionados a 24 grados” si no se quiere sentir el rigor tarifario, ha dicho Aranguren, que ha sugerido a la vez “desconectar los aparatos electrónicos cuando uno no está en el domicilio porque consumen un 10 % (del total utilizado)”.


ENDURECIMIENTO GENERAL

El tarifazo se conoce cuando se intensifica la ola de despidos en el sector público y a las puertas de las discusiones salariales entre sindicatos y empresarios. Macri regresó a Buenos Aires con el aplauso de los magnates de Davos, le pidió a los primeros que "pongan el hombro" (apoyen) y no se excedan en sus peticiones. Los sindicatos piden mejoras de un 30%. Los efectos del drástico giro que le ha impreso el macrismo a la política se sienten más allá de los bolsillos.

El arresto de una conocida dirigente social, Milagro Sala, a la que se acusa de extorsionar a las autoridades, la autorización judicial a la policía a pedir documentos en la calle a los ciudadanos y el decreto que declara el estado de emergencia en seguridad, son otras de las señales inequívocas del cambio.

Intelectuales, investigadores y dirigentes políticos alertaron sobre los peligros de un decreto presidencial que autoriza derribar aviones y abre las puertas a la participación de los militares en la lucha contra el narcotráfico y otras "asociaciones ilícitas", lo que puede ser un modo de definir la protesta social.

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REFORMA ELECTORAL Y POLITICA - Marcelo Nelson Mouhapé Fourné

Mensajepor Invitado » Dom 31 Ene, 2016 4:37 pm

31.01.2016 - Editorial Imagen
REFORMA ELECTORAL Y POLITICA

Marcelo Nelson Mouhapé Furné



ImagenComenzó a debatirse una de las promesas proselitistas del presidente Macri: la reforma electoral y política, cuyos ejes son el voto electrónico, la boleta única, un cronograma electoral unificado, el financiamiento claro de las campañas y crear un ente autónomo que organice los comicios.

En general, todos los puntos a los que apunta esta reforma son los que se requieren cambiar; habrá que ver después si la particularidad de la reglamentación para aplicarla es tan buena como la intención de modificar un sistema vetusto y costoso.

Lo que ya debería funcionar para las legislativas del año que viene es el voto electrónico con boleta única. No podemos seguir votando con un sistema manual inconveniente en lo logístico, muy permeable al fraude y carísimo en lo económico y en lo ambiental por el descomunal gasto de papel. Pretenden que las sábanas de varios cuerpos de las boletas partidarias se reemplacen con la boleta única, que será una planilla identificada con el color del partido político o alianza clasificada por los cargos a votar: ya sea a presidente, legisladores nacionales, representantes al parlasur, gobernadores, legisladores provinciales, intendente, concejales y consejeros escolares.

En cuanto a lo meramente electoral, desde mi punto de vista deben adoptarse definiciones porque no se puede repetir un año como el anterior donde hubo catorce elecciones.

El que haya tantos comicios tiene que ver con la mezquindad política de ver si saco algún "votito" más si voy desprendido de una elección nacional. Eso tiene que terminar; las elecciones para los tres niveles, nacional, provincial y municipal deben ser en un mismo día. Con eso se evitarían las especulaciones, se bajaría enormemente el gasto y se le complicaría muchísimo menos la vida a la gente: a los que trabajan como autoridades de mesa y a los que tienen que ir a votar.

Un aspecto a tener en cuenta para unificar los comicios es que hay provincias en donde la Constitución determina que su elección esté separada de las nacionales. Con lo cual, en esos casos debe haber una reforma constitucional. Y si la hacen, sería bueno que evalúen eliminar la bicameralidad en las provincias. Solo tiene sentido que haya una cámara de senadores nacional porque representan a las provincias, pero en las provincias los senadores tienen la misma representatividad que los diputados, por consiguiente solo estos deberían ser representantes legislativos. La unicameralidad en las provincias aceleraría los procesos legislativos, además de reducir considerablemente el gasto político-institucional.

Debería eliminarse la P.A.S.O. Quedó demostrado que en la primaria abierta, simultánea y obligatoria, son los menos los que dirimen sus candidaturas, y por agregar otra elección lo que se gasta y complica a la gente es un desperdicio absoluto. Los partidos políticos tiene que renacer y su interna partidaria es una herramienta vital para aumentar la participación y transparentar definiciones. Deben ser la mayoría de los afiliados quienes eligen a sus candidatos, no unos pocos dirigentes o los independientes en una interna abierta. Hoy, en la mayoría de los partidos los postulantes se eligen a dedo, y eso es antidemocrático.

El financiamiento de las campañas debe ser estatal en base al reparto de fondos en relación a los votos y privado en cuanto a los aportes de particulares. En este caso debería publlicarse que persona o empresa apoya a tal o a cual, para controlar que si ese tal o cual llega al gobierno no favorezca a sus patrocinadores ajudicándole licitaciones sospechosas. Está bien que alguien apoye con dinero a un candidato de su ideología; está mal que lo haga buscando una devolución de fondos púbicos. Para que esto no ocurra debe haber legislación que determine sanciones severas para las dos partes, y en el caso del funcionario también la destitución inmediata.

Tras los escándalos que hubo en varios comicios del año pasado crear un ente autónomo para organizar las elecciones es necesario. Hay que ver como se lo lleva a cabo para que cumpla eficazmente su objetivo de asegurar la legalidad del proceso.

De seguro surgirán muchos otros aspectos para sugerir modificar o agregar. Lo bueno es que comenzó a discutirse como mejorar y hacer fiable algo basal para una democracia: que sistema actualizado usar para darle seguridad al votante de que su elección no será alterada.

Marcelo N. Mouhapé Furné.



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Mensajepor Invitado » Mar 16 Feb, 2016 3:22 pm

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Víctor Hugo Morales: “El nuevo Gobierno es resultado de la mafia periodística
Por Flor Ragucci.
lunes, 15 de febrero de 2016

El popular locutor es el ejemplo más visible del encarnizado silenciamiento de voces opositoras que el flamante presidente argentino, Mauricio Macri, respaldado por el monopolio mediático de Clarín, lleva a cabo desde su asunción. Víctor Hugo explica en detalle los motivos de su abrupto despido en la radio en la que trabajó durante treinta años.

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“Los miserables que acallaron a Víctor Hugo” podría, quizás, titularse también esta entrevista, a juzgar por el firme hilado de argumentos que el célebre locutor de la Argentina fue tejiendo a lo largo de la misma para defenderse de un despido “producto del sistemático ataque a las libertades” del gobierno de Mauricio Macri. Víctor Hugo Morales, la voz que hizo llorar tras la pelota a millones de argentinos con relatos inolvidables como el del famoso gol de Maradona a los ingleses, es también la voz que durante los últimos años levantaba al país con su programa “La mañana”, de Radio Continental, el tercero más escuchado de la Argentina. Pero el 11 de enero, cuando se preparaba para salir al aire, Víctor Hugo fue interpelado bruscamente por directivos de la radio, un notario y fuerzas de seguridad que le notificaron que desde ese mismo instante quedaba fuera del medio.

El periodista- que este año cumplía diez años haciendo el programa y cincuenta como relator de fútbol, treinta de ellos en Radio Continental- corrió a avisarles a sus oyentes que ni ese día ni los siguientes volverían a tomar mate en su compañía y un colega suyo filmó todo lo sucedido para que el atropello no quedara impune. “Hola Paulino, perdón por la intromisión: me están echando de la radio”, lanzó un Víctor Hugo conmocionado que, pese a las amenazas, cogió el micro de la emisión anterior y pudo comunicarse así por última vez con su público.

Por última vez desde Radio Continental. En periódicos y televisiones afines, frente a una multitud que fue a apoyarlo a Plaza de Mayo al día siguiente de su despido, en parques de toda Buenos Aires, en organismos culturales de diversas ciudades, en las redes sociales, Víctor Hugo sigue siendo el mayor referente de las voces críticas al gobierno macrista y a su socio, la corporación mediática de Clarín.

Ahora que han pasado varias semanas de su abrupto despido de la radio me imagino que ya ha podido salir del shock inicial y empezar a asimilar lo sucedido… ¿Cómo lo lleva?

Muy bien y muy mal. Muy bien en el sentido de que cuando se asumen riesgos, estos están y si se concretan uno no puede quejarse porque ya sabía de antemano a lo que se exponía. Incluso podría decir que me siento halagado de que me ocurra algo que le da sentido a todo lo anterior y que me fortalece espiritualmente.

Por otro lado, estoy refugiado en un libro que escribo apasionadamente sobre los cien días de Macri para hablar del neoliberalismo en Argentina. Lo estoy haciendo con enorme placer porque me permite una catarsis, al mismo tiempo que me mantiene entrenado sobre los avatares políticos del país.

También me están invitando a dar charlas en diferentes ciudades, a las que acude mucha gente en busca de un poco de alivio y esto genera un ida y vuelta que es muy contenedor, un gran masaje al corazón.

¿Hay perspectivas de volver a trabajar en radio?

En estos momentos convocarme es muy confrontativo con el poder, mi discurso hace muy difícil la convivencia con un gobierno que es el más poderoso de la historia de este país. Ya me han llamado gerentes de importantes medios y cuando se quiere concretar algo se desmorona enseguida sin que puedan darme demasiadas explicaciones.

Creo que va a pasar un tiempo hasta que queden los heridos de las pautas publicitarias estatales en el camino y entonces sí que algunas empresas podrán volver a ponerse a tono con lo que la conciencia les dice y a animarse a tener voces duras con el Gobierno.

Quienes lo despidieron aducen “sucesivos incumplimientos contractuales” de su parte, pero usted asegura que los verdaderos motivos han sido políticos. ¿Por qué de repente una radio en la que usted trabajaba desde hace 30 años decide censurarlo?

Ya ellos habían intentado suavizar la carga de mi discurso en conversaciones previas e incluso me habían ofrecido un millón de dólares para que me fuera de la radio por las buenas, ya que me faltaba un año para terminar el contrato, pero a mí me pareció una traición a la gente y lo rechacé.

Indudablemente fueron las pautas publicitarias lo que los llevó a despedirme porque la radio depende en casi un 90 % de la publicidad estatal y, al ser esta manejada por el Gobierno, es lógico que se quiera tener buena relación con él. Más aún si se trata de una empresa extranjera, como es el caso de Radio Continental que hasta hace unos meses era propiedad del Grupo Prisa y ahora pertenece al conglomerado mediático de Ángel González, que por venir de afuera se siente con cierta debilidad y negocia directamente con el Gobierno.

A las declaraciones del presidente Macri sobre su despido, en las que afirma que su gobierno no se inmiscuye en tareas periodísticas y que, por tanto, nada tuvo que ver con la acción de Radio Continental, usted ha respondido “Macri es Magnetto [hombre fuerte del Grupo Clarín que concentra la mayoría de los medios argentinos]”. ¿Tan estrecha cree que es la vinculación entre el nuevo Ejecutivo y este monopolio mediático?

El presidente dijo eso el mismo día en que echaban a varios periodistas por su ideología de Radio Nacional, lo cual demuestra que su “poca o nula injerencia en asuntos mediáticos” es una enorme mentira. También se atrevió a decir que yo había estado en su despacho charlando con él, cosa que nunca hice. Macri es un vulgar mentiroso.

El nuevo Gobierno es la resultante de la acción mafiosa y desprovista de valores éticos y morales de un grupo periodístico que domina el país, porque la corporación mediática es la que lo sostiene todo. Argentina está ahora de rodillas a los monopolios, y esos monopolios actúan descaradamente para poner los precios que se les antoja sin ninguna regulación que los controle gracias a una corporación mediática que lo enmascara. Por tanto, mi razonamiento político no puede ir para otro lado que no sea el de decir que el país está en manos de Clarín. Macri actúa con su rostro pero tapando al verdadero poder que se llama Héctor Magnetto, director ejecutivo del gran grupo de medios.

Recientemente el decreto con el que Macri paralizó la aplicación de la Ley de Medios impulsada por Cristina Kirchner- norma que pretende desmonopolizar el mercado de la comunicación radiofónica y audiovisual y que agudizó el enfrentamiento entre su gobierno y el Grupo Clarín- fue anulado por dos jueces federales argentinos quienes, además repusieron al titular de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), órgano que por orden de Macri fue intervenido a solo trece días del comienzo de su mandato. ¿El proceso de redistribución mediática podrá seguir adelante?

Ahora estamos en medio de una batalla judicial, a la espera del fallo inminente de un juez que presumo intentará recomponer el AFSCA. Pero cuál será el alcance de esto me lo pregunto con escepticismo.

Lo que hicieron con el Decreto de necesidad y urgencia para pulverizar la Ley de Medios fue darle a Magnetto la posibilidad de comprar Nextel [la cuarta operadora de telefonía móvil del país], transacción que la norma del gobierno kirchnerista había prohibido.

La ley de Medios es una de las medidas que usted más ha defendido del gobierno de Cristina Kirchner pero, en general, ha apoyado toda su gestión y se lo identifica como portavoz de ese 49 % de argentinos que la votó y la sigue fervorosamente. ¿Es usted “un fanático kirchnerista”, como lo tildó Macri?

Este fue el otro fundamento que alegó el presidente para justificar mi despido, siendo que él sabe que si hay en mí algún tipo de fanatismo es el de estar en contra de los monopolios mediáticos, contra los que vengo luchando desde hace 25 años. Entonces, si yo lucho contra el Grupo Clarín y sale una ley como la de medios que también se enfrenta a ellos, claramente la voy a apoyar.

También hay otras medidas de la anterior legislatura que destaco, como la de haber minimizado la deuda externa a unos límites que no hay prácticamente en el mundo. Estableció un punto de vista soberano queriendo vivir de lo propio y no lo ha hecho mal: la gente está jubilada y los niños asistidos en un 100%, la mortalidad infantil bajó de un 23 a un 11 %, los derechos individuales han crecido, bajó el índice de desempleo a un 5,4 %- de una película que había empezado con un 24 %-, potenció el desarrollo de pequeñas empresas -que son las que sostienen el país y que ahora con el neoliberalismo están muy amenazadas-, abrió universidades por todo el territorio, aumentó la presencia del Estado en la vida de la gente, posibilitando la contención que el Estado da a los más vulnerables … Y todavía este listado es insuficiente para valorar todo lo positivo que el anterior gobierno nos ha dejado.

¿Sintió la libertad de expresión amenazada en algún otro momento desde la llegada de la democracia en Argentina, en 1983?

El kirchnerismo tuvo alguna etapa que también me causó preocupación, yo mismo quedé afuera de la televisión pública en el 2006, cuando tenía un programa que llevaba a cabo desde hacía cinco años. En ese momento hubo un gran referéndum entre Uruguay y Argentina por la instalación de las papeleras Botnia en la frontera y yo, aún con la incomodidad de ser uruguayo y vivir en la Argentina, tomé una posición muy dura contra los Kirchner en la televisión pública. Estando yo en Alemania, que me había ido para el campeonato de fútbol, el canal dio de baja el programa y yo se lo atribuí a mi posición en defensa del Uruguay y lo denuncié como una limitación de la libertad de expresión. Pero cuando volví a la Argentina, la directora de canal me ofreció elegir cualquier franja horaria para hacer el programa que yo quisiera con total libertad. Esto me demostró que se trataba de un problema con la productora y no con mi discurso.

Si a mí me hubiera echado Prisa, cuando sistemáticamente he sido muy crítico en el diario El País por su actitud hacia América Latina, hubiera tenido también cierta lógica y yo habría debido aceptarlo. Pero en este caso con Radio Continental es distinto porque yo no tenía ningún problema con la empresa sino que la empresa necesitó limpiar el aire de una voz que, como usted verá, no tiene pelos en la lengua en un momento en que el miedo es paralizante en la Argentina.

No solo ha sido su caso, otros periodistas críticos dentro de la radio y gran parte de la plantilla de Radio Nacional fueron despedidos durante los últimos días, el famoso programa opositor “678” que emitía la televisión pública fue retirado de la programación, 27 mil empleados estatales están siendo removidos de sus puestos… ¿Es todo parte de un mismo plan de silenciamiento?

Terminaron con “678” que era el único alivio de la gente en estos últimos años para que el discurso hegemónico del periodismo pudiera ser revisado desde el humor y la crítica. Se quitaron de encima también a todos los conductores de voz fuerte de la Radio Nacional, ignorando sus contratos firmados por el gobierno anterior, pulverizaron la Ley de medios y pusieron en el lugar del AFSCA un organismo de absoluto control del Poder ejecutivo que tiene una integración de 5 a 2 para quien gobierna, “la Troika” de Clarín, Cambiemos [el partido de Macri] y el Poder judicial, que también hizo su aporte procesando a dos ex funcionarios del Gobierno por el supuesto ataque que hicieron a Clarín y designando en comisión a dos jueces que son el riñón del grupo mediático... La desfachatez con la que actúan para quedarse con todo es desproporcionada con la imaginación que uno puede llegar a tener.

Por otra parte, se está reprimiendo con ardor a los empleados que protestan por los despidos masivos, una represión típica del neoliberalismo que hasta ahora ha producido heridos pero que yo creo que acabará matando porque todavía estamos en verano y las manifestaciones son de carácter modesto. La gente todavía está más perpleja y dolorida que en condiciones de reaccionar.

Cuando fueron a por usted la mañana del 11 de enero, le impidieron salir al aire y hacer un programa que tenía preparado sobre el balance del primer mes de gobierno de Mauricio Macri. ¿Qué hubiera dicho? ¿Qué diría ahora?

Además de todo lo que acabo de mencionar sobre la entrega a las corporaciones del control del periodismo y la brutalidad de los despidos masivos, explicaría cómo la Corte suprema tiene a un presidente, Lorenzetti, que desde que Clarín- hace dos años- lo pusiera en sus portadas como un delincuente que le robaba dinero a los jubilados en su ciudad natal, se convirtió para siempre en un rehén ideológico del Grupo de Magnetto.

También hablaría de Milagro Sala, una extraordinaria luchadora, brutalmente invisibilizada en la historia de la Argentina, que ahora está presa por cualquier delito que le fueron añadiendo, ya que ninguno era justificación suficiente para su detención. Sin olvidar que, al mismo tiempo que Milagro Sala estaba en la cárcel de Jujuy, el presidente del Banco Central- que sí que está procesado por el megacanje y el blindaje que fueron dos terribles delitos de las políticas públicas cometidos en 2001- hacía negocios en Davos para permitir el retorno del FMI a la Argentina.

La orden de derribar a los aviones que no contestan cuando son interceptados por la presunción de que lleven drogas, con lo cual se aplica la pena de muerte sin juicio y sin nada, es otra muestra de un concepto que solo se puede sostener desde la derecha; así como el echar por tierra, para poder relacionarse con [David] Cameron de rodillas, todo lo conseguido por los gobiernos anteriores a favor de que las Malvinas vuelvan a ser argentinas.

Han sido dos meses pavorosamente neoliberales que anuncian un cambio radical de las políticas de este país hacia la desprotección de los vulnerables y el traspaso de los recursos a muy pocas manos, consolidando la tendencia mundial a la que ahora Argentina también se adhiere.

En España la versión que llega a través de los medios es muy diferente y, generalmente, coincide con lo difundido por Clarín que, a su vez, es socio del grupo Prisa/Telefónica...

Imagine que en su país todos los medios fueran de un mismo dueño y que este, además fuera Rodrigo Rato… ¿Qué versión tendríamos de las cosas que ocurren en España?

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Mensajepor Invitado » Vie 19 Feb, 2016 5:48 pm

Imagen

Una cría de delfín muere mientras un grupo de bañistas la pasa de mano en mano para hacerse 'selfies' en la playa

Nadie se percató que estaba sufriendo un grave aumento de su temperatura corporal fuera del agua, lo que le provocó deshidratación y finalmente la muerte en pocos minutos.

Un grupo musical inglés cancelará sus conciertos en Argentina "hasta que aparezcan los asesinos del delfín"


Ha ocurrido en el resort hotelero de Santa Teresita en Argentina. Un hombre sacó a una cría de delfín del agua y empezaron a hacerle fotos. El número de personas en torno al animal fue en aumento y comenzaron a pasarse al cetáceo para hacerse fotos con él, según informa Sky News.

Mientras el pequeño animal pasaba de mano en mano, ninguno de los bañistas se percataba que estaba sufriendo un grave aumento de su temperatura corporal fuera del agua, lo que le provocó la muerte en pocos minutos. Por ello, muchos continuaron haciéndose fotos con el cuerpo del animal, aunque éste ya estaba muerto.

Aunque el hombre que lo sacó del agua intentó que el delfín se recuperar devolviéndolo al mar, ya nada se podía hacer por el animal, cuyo cuerpo quedó tendido en la arena.


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reduck

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Mensajepor reduck » Vie 19 Feb, 2016 8:02 pm

cuanta brutalidad.

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Mensajepor Invitado » Vie 19 Feb, 2016 9:28 pm

reduck escribió:cuanta brutalidad.


estos son los que llaman brutos a los gashegos... :mrgreen:

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Re: ARGENTINA NO CONFIABLE...

Mensajepor Assia » Jue 25 Feb, 2016 11:11 pm

A ver si algun colega argentino nos informa de lo que esta pasando en Argentina. El ex-Presidente argentino Carlos Menem, de 85 anos de edad, ha hecho publico que Cristina Fernandez de Kirchner asesino a su marido por'' supuestos malos tratos fisicos'' que sufria la Cristi por parte de su marido.
Assia

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Carlos Alberto

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Mensajepor Carlos Alberto » Jue 25 Feb, 2016 11:46 pm

Acá tenés...



Carlos Menem Entrevista. Habla sobre Nestor y Cristina Kirchner
Carlos Menem, a los 85 años, reapareció en los medios de comunicación y realizó explosivas declaraciones. El expresidente se animó a opinar sobre el fallecimiento de Néstor Kirchner y lanzó: “La muerte de Néstor quedó en duda, muchos sostienen que lo habría matado la mujer. Néstor la castigaba feo"

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Re: ARGENTINA NO CONFIABLE...

Mensajepor Assia » Vie 26 Feb, 2016 12:02 am

Muchas gracias Carlos Alberto por colgarnos ese video. Es muy grave insinuar esas acusaciones y se deberia de aclarar si Cristi, fue resposable de precipitar la muerte de su mrido,aprovechando que sufria de 1 grave enfermedad cardiaca. Seria muy facil comprobarlo si se le hiciera la autopsia, ya que Nesto Kirner no fue incinerado.
Gracias 1 vez mas.
Saludos,
Assia

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Re: ARGENTINA NO CONFIABLE...

Mensajepor Assia » Vie 26 Feb, 2016 12:04 am

DISCULPAD: quise decir Nestor Kirchner.
Assia

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Acusan a Cristina Fernández y a su hijo de asesinar a Néstor Kirchner

Mensajepor Invitado » Vie 26 Feb, 2016 12:23 am

Gracias Carlos Alberto. Ya se hablo de este asunto hace años


Acusan a Cristina Fernández y a su hijo de asesinar a Néstor Kirchner


La verdadera historia sobre muerte de Kirchner


¿ASESINARON A KIRCHNER?
Denuncian a Cristina Fernández por el presunto asesinato de Néstor Kirchner
Un abogado pide la exhumación del cadáver. Según dos testigos, el expresidente habría sido 'asesinado de un tiro en la nuca'.
http://www.diariodecuba.com/internacion ... _3257.html

Piden que se investigue la muerte de Néstor Kirchner
El justicialista Juan Ricardo Mussa solicitó a la Justicia que se exhume su cuerpo para saber si habría sido asesinado.
http://www.perfil.com/politica/Piden-qu ... -0031.html

http://despiertaalfuturo.blogspot.com.e ... stina.html
http://www.notimerica.com/politica/noti ... 75053.html




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