FELIPE JUAN FROILÁNEl sobrino del Rey Felipe volvió a ‘catear’ en septiembre y sus padres tienen prácticamente decidido mandarle a un internado fuera de España
OTRA VEZ AL EXTRANJERO POR ‘TRIPITIR’
CONSUELO FONTDe poco le ha servido a Froilán el castigo que este verano le pusieron sus padres. En efecto, el primogénito de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar, de 16 años, pasó casi todo el mes de julio interno en el colegio episcopal de la Sagrada Familia de Sigüenza (SAF) a consecuencia de sus malas notas, ya que había cateado prácticamente todas las asignaturas de segundo de ESO que ha cursado este año. Un encierro del que no se libró hasta el último fin de semana, cuando viajó a Mallorca con su madre para pasar unos días junto a su abuela, la Reina Sofía, en Marivent, e incorporarse al curso de vela que siguió en Calanova junto a sus primos, los hijos de la Infanta Cristina.
Un encierro del que no se libró hasta el último fin de semana, cuando viajó a Mallorca con su madre para pasar unos días junto a su abuela, la Reina Sofía, en Marivent, e incorporarse al curso de vela que siguió en Calanova junto a sus primos, los hijos de la Infanta Cristina. Pero según ha podido averiguar LOC por fuentes cercanas a la propia Infanta, el esfuerzo y los 1.500 euros que costó el SAF fueron baldíos, ya que el sobrino del Rey Felipe ha vuelto a suspender este mes de septiembre. La consecuencia, habida cuenta de que ya era repetidor, es que, según las normas del colegio Santa María del Pilar, donde cursa sus estudios desde el año 2011, no podrá continuar en este centro.
"Para sus padres fue un auténtico mazazo, aunque tampoco les ha pillado por sorpresa, porque sabían que en este centro las normas no permiten
tripitir. Así que parece firme su decisión de mandar a Froilán este curso interno al extranjero. De momento se desconoce a qué lugar, aunque inicialmente se inclinaban por Inglaterra, donde el adolescente ya estuvo interno en el año 2010, y cuenta con la ventaja de tener prestigiosos internados además de la proximidad y frecuencia de vuelos. De hecho, la Infanta viajó a Londres a principios de septiembre con este objetivo".
En efecto, Froilán, que pasa por ser el nieto más díscolo de Don Juan Carlos y Doña Sofía, fue enviado durante un curso cuando contaba 13 años a un prestigioso
boarding school del condado de Sussex, al sur de Inglaterra. No se trataba en esta ocasión de un castigo propiamente dicho, a pesar del carácter travieso y alérgico a hincar codos del que siempre hizo gala Froilán. En realidad, el hijo de la duquesa de Lugo había finalizado el primer ciclo de primaria en el colegio San Patricio, ubicado en la madrileña calle Serrano, y se trataba de aprovechar para que perfeccionara inglés y se empapara de la disciplina del internado británico, así como de la experiencia de vivir lejos del hogar materno.
Entonces se daba por hecho que continuaría sus estudios de ESO en el extranjero, pero sorprendentemente regresó a España y su madre, la Infanta Elena, lo matriculó en el colegio Santa María del Pilar, un centro católico muy cercano a su domicilio en la colonia del Niño Jesús. Según la fuente antes citada, "Froilán había padecido especialmente el divorcio de sus padres y el acoso mediático al que fueron sometidos él y su hermana, Victoria Federica, hasta el punto de romper a llorar cuando se aproximaba un fotógrafo. Todo ello, además de limar su carácter rebelde, hizo aconsejable su alejamiento. Pero la estancia no fue fácil, ya que extrañaba mucho a su familia y a su país, y sus padres, que frecuentemente lo visitaban, así como su abuela la Reina Sofía, también añoraban a su hijo, por lo que decidieron que regresara a Madrid".
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FUERA DE LA NOCHE
La actividad social de Froilán se ha reducido a la mínima expresión. Ya no ejerce el papel de relaciones públicas de discotecas 'light' ni guarda relación con sus responsables. "Ya ni contesta a mis 'whatsapps'", asegura el jefe de sala de fiestas 'light' con el que compartía largas tardes de Playstation
[/table]DISPARO TRAUMÁTICOEl primogénito de los duques de Lugo parecía bien adaptado a su nuevo colegio, cuando a mitad de curso un dramático acontecimiento volvió a torcer su trayectoria estudiantil: el 9 de abril de 2012 sufrió un grave accidente al dispararse con una escopeta en su pie derecho mientras practicaba tiro con su padre, Jaime de Marichalar, en su finca de Soria.
La lesión fue bastante seria, incluso a punto estuvo de provocarle la amputación de un dedo del pie. Además de soportar una larga convalecencia en casa con el pie inmovilizado, lo cual para un adolescente de 14 años es un martirio, a Froilán le afectó mucho psicológicamente el susto, lo que le condujo a que perdiera ese curso de segundo de ESO. Dadas las circunstancias, en el colegio le proporcionaron una segunda oportunidad, que tampoco llegó a buen puerto, siendo ubicado este curso pasado en el llamado grupo de diversificación escolar, donde compartió aula con otros alumnos repetidores. Pero de nada ha servido, porque Froilán ha vuelto a suspender y esta vez sin posibilidad de continuar en el colegio.
Según sus profesores, muestra un pasotismo casi absoluto por las materias. Según la fuente antes citada, "a Froilán desde pequeño le resultó difícil sobrellevar la disciplina colegial. Tiene virtudes, entre ellas la nobleza y un gran corazón, pero en los estudios siempre fue un trasto. A los avatares antes mencionados de la separación de sus padres y el accidente, ahora se ha unido la típica rebeldía de la adolescencia, por lo que quizá es el momento idóneo de mandarle a un internado extranjero".
Decisión que para sus padres, la Infanta Elena y Jaime de Marichalar, supone un auténtico calvario, ya que durante su estancia en Inglaterra le añoraron mucho. Aunque ahora, Froilán también va a dejar un vacío en las páginas de la prensa rosa, ésa que tanto le incomoda, y que este año ya comenzó a nutrirse de sus primeras escapadas a discotecas.
EL MUNDO / LA OTRA CRÓNICA /SÁBADO 20 DE SEPTIEMBRE DE 2014
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