CASA REAL GRIEGA

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Tatiana Blatnik, bellísima, en una fiesta en Nueva York hace un año.


TATIANA BLATNIK
LA PRIMERA DIVORCIADA DE LOS BIEN CASADOS PRÍNCIPES GRIEGOS

Contra todo pronóstico, la bella venezolana y el hijo de los reyes de Grecia se separan después de 14 años juntos. Ella, millonaria, está volcada en su fundación en pro de la salud mental tras una infancia marcada por el suicidio de su padre.

BEATRIZ MIRANDA


PARECÍAN LA PAREJA PERFECTA. Guapos, ricos, felices en los encuentros de la alta sociedad, en las revistas y en Instagram, el actual termómetro del amor. Al final, tristemente su vida no era tan idílica como creíamos. Catorce años después de su boda, Tatiana Blatnnik (44) y el príncipe Nicolás de Grecia (54) han puesto fin a su matrimonio. Así lo comunicó la Casa Real Griega este fin de semana: “El príncipe Nicolás y la princesa Tatiana, tras 14 años de convivencia, han decidido disolver su matrimonio. Ambos expresan la dificultad de esta decisión, el profundo aprecio y respeto que se tienen, pero también el amor con el que han caminado todos estos años. Los mismos valores de respeto y comprensión formarán la base de su relación en el futuro, una relación de amistad profunda y sincera. Seguirán viviendo y trabajando en Grecia, lugar en el que ambos se sienten como en casa. La familia siempre estará a su lado. Muchas gracias por su respeto y discreción”. Fin.

LUCIR CON GRACIA LAS JOYAS GRIEGAS
Tatiana Blatnik es una mujer guapísima y muy estilosa que ha lucido con gracia las joyas de la casa real griega tanto en su boda como en alguna cena de gala. Los Grecia tienen un buen joyero lleno de tiaras, collares y pendientes, aunque no conservan ninguna corona. Tatiana se puso en su boda la tiara Antique Corsage, de brillantes y perlas. Se la prestó su suegra.

La pareja se conoció gracias a Marie Chantal Miller en 2003. La rica americana, esposa de Pablo de Grecia, organizó un viaje de esquí a Gstaad y en uno de sus clubs más exclusivos surgió el flechazo. Un año más tarde les fotografiaron por primera vez en los Juegos Olímpicos de Grecia.

En 2010 se casaron en el monasterio de Agios Nikólaos de la isla griega de Spetses, donde veranea la familia real. Allí se dio cita lo más granado de la realeza internacional, también nuestros borbones al completo. Allí se tomó una de las últimas fotografías que hay de los Reyes Felipe y Letizia felices y relajados junto a sus hermanas y Urdangarin (Elena ya estaba separada de Marichalar) antes de empezar los problemas.

Tatiana y Nicolás, que no han tenido hijos, se marcharon recién casados a vivir a Londres. Tatiana se puso a trabajar como publicista y mano derecha de la diseñadora Diane von Fürstenberg y Nicolás en la oficina real de su padre.

Dos años más tarde se mudaron a Grecia, donde volvieron a residir los reyes Constantino y Ana María después de años de exilio en Inglaterra. Allí Tatiana montó la asociación sin ánimo de lucro Breathe Hellas para ayudar a enfermos de salud mental, un tema que conoce de primera mano debido a su trágica historia familiar.

Tatiana, nacida en Caracas, Venezuela, en 1980, es hija de la aristócrata alemana Marie Blanche Bierlein, que pasó muchos años en Andalucía, y de Ladislav Vladimir Blatnik, un empresario esloveno de origen judío que se hizo rico con la industria del calzado en Latinoamérica.

Cuando era una niña, el matrimonio, Tatiana y su hermano Boris, al que está profundamente unida, se mudaron a Suiza . Ella tenía apenas 7 años cuando su padre se suicidó, dejando a la familia un enorme vacío.

Su madre, una vez superada la muerte inesperada de su marido, se casó con el inversor multimillonario Attilio Brillembourg, una de las mayores fortunas de Venezuela, que llevó a Tatiana al altar en su boda con Nicolás, ya que ella le considera su segundo padre.

Tatiana estudió en el internado suizo Aiglon College, luego se licenció en Sociología en Georgetown, donde convivieron años antes el rey Felipe VI y su primo e íntimo amigo Pablo de Grecia.

Tatiana no ha eludido hablar nunca de su trauma familiar, episodio del que ha hecho virtud profesional. Hace dos años se sinceró en el programa Pame Danai de la tv griega: «Yo tenía siete años cuando mi padre se suicidó, pero me enteré con 14, y a los 20 logré hablar del tema». Según su testimonio, no fue solo el suicidio lo que la traumatizó, sino el secretismo que su familia mantuvo alrededor de las circunstancias y razones de la muerte de su padre. Por eso, la nuera preferida de la reina Ana María de Grecia siempre se ha cuidado mucho, casi hasta la obsesión, tanto a sí misma y como a los demás. Hace yoga, da largos paseos con amigos, practica mindfulness (ha revelado que su hermano la inició en esa disciplina) y mima mucho su alimentación.

Su fundación, Breathe, de la que nace la ONG Breathe Hellas mentada antes, conciencia sobre la importancia de identificar los problemas de salud mental para poder tratarlos cuanto antes. Como se explica en su web, «tiene como objetivo mejorar la comprensión de la salud mental mediante la creación de herramientas de autocuidado que se pueden utilizar en el hogar y que pueden crear un sentido de comunidad, al mismo tiempo que simplifican el acceso a la atención profesional de salud mental».

Según ha confirmado la Casa Real Griega, Tatiana mantendrá su título de princesa de Grecia y Dinamarca de momento. Otra cosa es cuando firme el divorcio... O si rehace su vida.

EL MUNDO / SÁBADO 27 DE ABRIL DE 2024