El tro-pezón de Carlota
Otro descuido más de la princesa nos ha enseñado parte de sus encantos
Capri - 19 de agosto
Hasta ahora sólo habíamos visto la ropa interior de Carlota Casiraghi, pero otro de sus descuidos nos ha mostrado parte de los encantos de la hija de Carolina.
Operación bikini
Carlota Casiraghi, de 20 años, está obsesionada con el tamaño de sus pechos. Tanto, que se descuidó y nos mostró uno de ellos mientras navegaba por la costa italiana en el yate familiar, El Pachá. La hija de Carolina de Mónaco vive muy pendiente de su imagen, pero parece olvidarse de que los fotógrafos siempre están dispuestos a captar el más mínimo ‘tro-pezón’.
A sus 20 años, Carlota es toda una belleza, digna heredera de su madre. Además de elegancia, la joven princesa comparte con Carolina una leve tripita, que el verano pasado levantó rumores de embarazo.
El tro-pezón de Carlota
Otro descuido más de la princesa nos ha enseñado parte de sus encantos
Los descuidos de la princesa
Emulando a Letizia, Carlota Casiraghi nos ha mostrado gran parte de su lencería. Desde las típicas braguitas de algodón, hasta las más sofisticadas de encaje.
http://www.quemedices.wanadoo.es/reportajes/3542_1.html
El tro-pezón de Carlota
¿Qué le pasa a Carolina de Mónaco?
CARMEN VILLAR MIR
El «Svensk Damtidning», publicación sueca parecida al «Hola», pero con menos imágenes y más texto, sirve esta semana una noticia con fotos e interrogación añadidas, que nos ha dejado el alma encogida.
En esas fotos vemos a Carolina de Mónaco, aquella princesa de belleza desafiante, siempre rebosante de glamour y dinero, con expresión compungida, desaliñada, la cara hinchada y un ojo amoratado.
Tras consultar a un cirujano y desechar que esos cardenales e hinchazones sean el resultado de una operación de cirugía estética, la citada revista se pregunta si la hija de Grace Kelly es víctima de la denominada violencia doméstica.
Cuenta que las cosas no andan como debieran en su matrimonio con Ernesto Augusto de Hannover, un bebedor empedernido de carácter despótico, totalmente falto de la educación que le exige su alta cuna (es nieto de Jorge V y Jefe de la Casa más antigua de Alemania) y asegura que éste vuelve a verse con su ex esposa Chantal.
Y mientras se disparan las especulaciones y los dimes y diretes, parece innegable que la princesa, que no vive un cuento azul sino negro, ya no parece preocuparse por esconder sus dramas.
Esperemos que muy pronto pase este mal rato para la que fue reina de las portadas y que Carolina Grimaldi vuelva a vestir ropa de Chanel y Dior, a deslumbrar en los saraos internacionales de los miembros del Gotha y que su imagen recupere el brillo de antaño.