


Los padres de Madeleine buscan a su hija en España. Ayúdales.

David Beckham no dudó en fotografiarse con el póster de búsqueda de Madeleine, ahora los padres de la niña buscan apoyo en España.


Benedicto XVI bendice una fotografía de Madeleine en la plaza San Pedro
RUEDA DE PRENSA EN MADRID
Gerry y Kate McCann pidieron en Madrid una cooperación policial paneuropea para encontrar a su hija desaparecida en Portugal hace un mes.
1 de junio de 2007. Los padres de la niña británica Madeleine McCann, desaparecida hace ya casi un mes en el sur de Portugal, realizaron hoy un llamamiento a la cooperación policial "paneuropea" en la búsqueda de su hija, al tiempo que promocionaron la página web http://www.findmadeleine.com. Se trata de una campaña que incluye numerosos carteles de "se busca" para recuperar a la niña, que serán distribuidos en "zonas de alta visibilidad" como estaciones de metro y autobús, u oficinas de correos", según Gerry McCann, padre de la niña.
En su comparecencia ante los medios, y con la presencia de representantes de la embajada británica, Gerry McCann consideró la posibilidad que la pequeña Maddie, como se la conoce cariñosamente, pueda encontrarse en España. Ante esta situación, McCann solicitó la ayuda "de los españoles" como "apoyo a la investigación criminal" que se está llevando a cabo para descubrir al paradero de la pequeña.
"Es probable que alguien del público español tenga información sobre quién podría haber secuestrado a nuestra hija", afirmó McCann, que instó a los visitantes de la web a imprimir las fotos de la pequeña Madeleine y a distribuirlas en lugares públicos.
Madeleine, que cumplió cuatro años el sábado, desapareció el jueves 3 de mayo del cuarto del apartahotel en el que dormía con sus hermanos mellizos, mientras sus padres cenaban en un restaurante cercano. La Policía portuguesa desplegó un dispositivo sin precedentes para encontrar a la pequeña.
Al término de la declaración inicial realizada por su marido, Kate McCann, visiblemente afectada y sujetando en todo momento la mano de su esposo, limitó su intervención a explicar el efecto de la desaparición en la vida de los otros dos niños de la pareja, Sean y Amelie, de dos años de edad, que "pasan mucho tiempo juntos, saben que falta algo en su vida, saben que no está su hermana" pero por su corta edad "no entienden la trascendencia del suceso", explicó Kate.
En relación a la actividad desarrollada por las fuerzas de seguidad en la búsqueda de Madeleine, Gerry McCann señaló que "las desapariciones deberían ser tratadas de una forma paneuropea, como cualquier otro tipo de desplazamiento de individuos a nivel internacional". Al mismo tiempo que agradeció "la labor realizada por el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid".
Finalmente, McCann precisó que la última vez que la niña fue vista en público, en la playa de la Luz, iba acompañada de un hombre moreno, de unos 35 años, con chaqueta negra y pantalones claros, en torno al 1,70 m. de altura, una información que esperan contribuya a una "investigación proactiva" en España.
"Seguimos estando esperanzados y manteniéndonos positivos" acerca de un feliz desenlace, concluyó el padre de Madeleine.



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